De nuevo nos tenemos que ir hasta Japón, tierra de robots, para conocer al robot-oso protagonista de nuestra noticia. El país asiático es conocido por la longevidad de sus habitantes, y por lo tanto de la necesidad de asistencia, sea humana o robótica.
La máquina es la tercera evolución que realiza el Instituto Riken. El primer modelo apareció en 2009, conocido como RIBA. La segunda evolución - RIBA-II - llegó en 2011. La especialidad de la casa es la de cargar a personas desde o hacia una cama, con un poco de asistencia humana.
Las mejoras en cada uno de ellos pasan por un mejor control de sus fuerzas y operaciones, pero también por un adelgazamiento en su estructura. El último modelo pesa 140 kilogramos, una cifra que parece alta, pero que es mucho menos que los 230 kilos a los que llegaba RIBA-II.
Sí, lo de oso no es solo por su tamaño, ya veis que intentan que el robot parezca simpático caracterizado con la “cara” del animal. En el siguiente vídeo os mostramos su aspecto y habilidades, como la de ayudar a incorporarse de la cama, o incluso colocar al paciente en una silla de ruedas:
No hay comentarios:
Publicar un comentario